sábado, 30 de mayo de 2015

POLUFLOSBOIO..

Juan Vallés nació en 1832 en Puy-en-Velay. Tuvo una infancia
desgraciada y, desde muy joven fue consciente de los problemas
de los más desfavorecidos y de lo que llamó "la servidumbre del hambre"
Frecuentó a numerosos grupos revolucionarios mientras estudiaba 
Derecho y comenzaba su trabajo como periodista, que le llevaría a
fundar entre otros el famoso diario círitico Le Cri du peuple.
Encarcelado en varias ocasiones por sus crónicas y artículos, que
más tarde reuniría en distintos libros, se presentó como candidato
a las elecciones legislativas. En 1871, en medio de la guerra franco-prusiana, 
se produjo la insurrección popular en las calles de París: Vallés se convertiría 
en uno de sus cabecillas y sería, por ello, condenado a muerte. Exiliado en 
Londres, pudo regresar a Francia gracias a una amnistía. Murió en 1885, 
víctima de la diabetes. En 1935, Andreu Nin recordaba cómo más de 
60.000 obreros acompañaron el ataúd de Jules Vallés al grito de "Viva la Comuna".




A LAS PEQUEÑAS SOBRINAS 
DE
LA SEÑORITA BALANDREAU

LEGO CUANTO TENGO
A CONDICIÓN DE QUE 

PASEN A MI TÍO JOSEPH PITOU
UNA RENTA SUFICIENTE PARA MANTENER 
SUS CAPRICHOS DE BORRACHO
 
*** 


..........
POLUFLOSBOIO...

¡He dado un paso en la vida! Pero la toga de sabio apenas se sostiene sobre mis hombros gracias a un solo alfiler.
    ¡Comprendo todo el significado de Poluflosboio*!
    El profesor vino a comunicárselo a mi madre.
    "Señora mía, es un acontecimiento, todo un acontecimiento! ¡Cuando un niño sabe lo que significa Poluflosboio, cuando comprende bien todo cuanto hay de armonioso, profundo, de claro y, si se quiere, también de tenebroso en esa palabra, en la que se sostiene todo el genio de Homero, ese niño ha alcanzado las Columnas de Hércules de la gramática!¡Sí, señora, las Columnas de Hércules! Y no es sólo un colegial que conoce su camino, sino un alma que habla, un corazón que despierta..."
   -¿A qué profesión podría uno dedicarse cuando sabe qué significa todo eso de poalü-fos-boyó? -preguntó mi madre sin mucho interés.
   -A todas -replicó el profesor con una sonrisa discreta.
   Lo invitaron a comer. Hubo cierta solemnidad.
   Mi madre me trató como a un chico ya crecido. Cuando repartió el pollo, viví un momento de profunda emoción: dejó el muslo hasta el final de la pata. A los postres me hicieron recitar una fábula de Esopo. Nadie comprendió nada, todos los vecinos estaban celosos. Por la noche, les oí hablar en el dormitorio.
   -¡Polu flox goyo! ... ¡Ernest se salvó!... ¡Sí... Ahora podemos darle un hermanito!

*Expresión empleada por Homero: "En los profundos fragores"



ME PARTO

 Mi madre ya no me pega. Tengo los huesos demasiado duros, y la última ve que me zurró se hizo daño. Ahora es mi padre el que me da bastonazos. El hombre se aburre en la ciudad: pidió su traslado y está sin noticias. Cuando ha esperado al cartero y éste no trae nada, me da una tunda y se pasa feliz el resto del día. En la ciudad tiene fama de gracioso, de travieso. Cada vez que me echan de clase, me zurra. Es Delarend el que me hace que me echen a diario. ¡El animal de Delarend! ¡Haciendo muecas, me mira, saca la lengua, tuerce la nariz, imita al viejo Javanah, el profesor de inglés! Y yo me retuerzo, me parto en dos, ¡ y me pedorreo! Me echan.
    Parece que pedorrearse a causa de la risa es de mal agüero. Siempre me pasa, me dicen que voy a terminar en el patíbulo. Y debo confesarlo: a veces he merecido la muerte.



El testamento de un bromista
Jules Vallés

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